Tenía preparadas distintas actualizaciones sobre películas, series, grupos de música y demás... pero ayer salí enfadado del trabajo y he preferido explicarlo aquí.¿Qué pasó ayer? Pues bien, he estado preparando un video un tanto peculiar durante dos días. Es decir, tenía que realizar un video para animar a una empresa a seguir trabajando y conseguir buenos resultados (ya que el año anterior no había ido como esperaban). Para hacer este video nadie tenía ideas, no habían imágenes... y lo único que me sabían decir era que querían que fuese con películas y que fuese motivacional.
Bien, acepto el reto y hago un video con películas, con músiquita y demás y parece que funciona. A la gente le gusta y creo que está quedando bien. Hasta ayer. Ayer se tenía que entregar y no estaba terminado. Faltaban arreglar treinta segundos de video. Y no iba a estar terminado. Así que tuve que hacer esos treinta segundos rápido y mal. Y quedaron mal. Muy mal. Yo no podía dejar que eso terminase así, pero la empresa prefirió enviar ese video con un final muy malo antes que pedir a la gente que nos había contratado un día más para terminar el video.
Así que cuando salí del trabajo salí muy enfadado, porque sabía que el video estaba mal y que con más tiempo hubiese estado bien. ¿Y qué hice? Cuando llegué a casa hice el final que a mí me hubiese gustado. Y me quedé muy a gusto. Porque no puedo evitar ser perfeccionista en mi trabajo... y no soporto ver que algo está mal hecho sabiendo que puede estar bien hecho.
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